Estas feromonas están formuladas para potenciar la atracción. Su uso adecuado te ayudará a mejorar tu comunicación no verbal y a generar una conexión más profunda.
Aplicación: Aplica una pequeña cantidad de producto (1-2 gotas) en las zonas de pulso: muñecas, cuello, detrás de las orejas. No es necesario aplicar grandes cantidades, ya que las feromonas son muy potentes.
Difusión: Permite que el producto se absorba por completo antes de vestirte. Evita frotar la zona de aplicación.
Frecuencia: Se recomienda aplicar el producto una vez al día, o según sea necesario.
Experimentación: La intensidad de las feromonas puede variar según la persona y el entorno. Experimenta con diferentes cantidades para encontrar la que mejor se adapte a ti.
Para mejores resultados, utiliza el producto en combinación con una buena higiene personal y una actitud positiva y segura.
Ten en cuenta que la percepción de las feromonas puede variar de una persona a otra.
No aplicarla en las prendas de vestir ya que la formula puede mancharle o deteriorarlas.
Mantener fuera del alcance de los niños.
Evitar el contacto directo con los ojos. En caso de contacto, enjuagar con abundante agua.
Si observas alguna reacción alérgica, suspende su uso y consulta a un médico.
No ingerir.
Almacenar en un lugar fresco y seco.
Menos es más: Aplica una cantidad pequeña, ya que las feromonas son muy potentes. Un exceso puede resultar contraproducente.
Zonas de pulso: Aplica las feromonas en las zonas de pulso (muñecas, cuello, detrás de las orejas) para que se difundan mejor.
Piel limpia: Asegúrate de que tu piel esté limpia y seca antes de aplicar las feromonas. Evita usar cremas o perfumes que puedan interferir con su efecto.
Experimenta: Prueba aplicando las feromonas en diferentes momentos del día o en diferentes situaciones para ver cuándo funcionan mejor para ti.
Combinarlas: Puedes combinar las feromonas con tu perfume habitual.
Paciencia: Las feromonas no actúan de forma inmediata. Dale tiempo para que hagan efecto.
Confianza: La confianza en uno mismo es fundamental. Las feromonas son un complemento, no un sustituto de la seguridad personal.
Observa: Presta atención a cómo reaccionan las personas a tu alrededor cuando usas las feromonas. Esto te ayudará a determinar su efectividad.
Almacenamiento adecuado: Guarda las feromonas en un lugar fresco, seco y oscuro para prolongar su vida útil.
Reacciones alérgicas: Si experimentas alguna reacción alérgica, deja de usar las feromonas inmediatamente y consulta a un médico.